No hay nada como el calor humano, aunque de momento este tenga que ser, en muchos casos, a través de la mirada y con la sonrisa escondida.
Si tapar nuestra sonrisa puede proteger a los demás, es un acto amor, o como mínimo un acto solidario.
No hay nada como el calor humano, aunque de momento este tenga que ser, en muchos casos, a través de la mirada y con la sonrisa escondida.
Si tapar nuestra sonrisa puede proteger a los demás, es un acto amor, o como mínimo un acto solidario.